Mirando al Cielo
Volviendo a lo
Espiritual: La decepción del siglo XX
“Entonces
Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí
mismo, y tome su cruz, y sígame” Mateo 16:24
En los
siguientes artículos estaremos “volviendo a lo espiritual”, a lo propio de
Dios, a lo santo. Cuando se vive una baja espiritualidad, poca relación con Dios,
un olvido de él y una espiritualidad espuria y superficial, se hace pertinente
alentar a todo llamado hijo de Dios, que vuelva a lo realmente espiritual.
El
siglo XX, el siglo de la Post modernidad, de la razón, de la justicia y de las
igualdades y causas sociales no ha traído muchas alegrías; al contrario, está
llena de decepciones tras decepciones. Estamos conscientes que la historia de
la humanidad está plagada de fracasos, pero ¿Habían estado concentradas todas
en un mismo siglo?
Veamos:
contamos en este inventario con dos guerras mundiales y bombas nucleares
incluidas. Los distintos y mayores “holocaustos” y genocidios son nata en este
siglo: Las purgas Bolcheviques, el holocausto Judío, el genocidio en Ruanda, en
el Congo, en Bosnia, en Ayacucho, Perú, en Chile y la Dictadura, en Camboya,
etc. Las hambrunas son parte de toda la historia, pero conocidas (y obviadas en
la mayoría) colectivamente por toda la humanidad en este siglo. La gran peste
del siglo XX, como el Sida, ha cobrado millones de víctimas. El desenfreno
moral y social de los Países “morales”, como EEUU y Europa nos ha traído
consecuencias nefasta (somos una copia feliz del gringo); un apego al materialismo
y consumismo, un idealismo hedonista y narcisista, un desapego a lo Escritural
y Bíblico, son las heredades dejadas por las potencias… Además de una crisis
económica sin precedentes, una que ya habíamos tenido en el año 29, y que ahora
se repite en doble escala (que todavía
no se hace sentir en Chile, gracias a su economía,.. por ahora), pero que tiene
a países como Grecia, Italia, España, Portugal y los mismos Estados Unidos, al
borde de la quiebra.
Muchos
están decepcionados y se han relanzado a la búsqueda de una vida espiritual,
pero lamentablemente una espiritualidad basada en el “YO”. Filosofías místicas,
Nueva Era, meditaciones trascendentales y demás, son tendencias centradas solo
en el “YO”, en lo que YO logre, lo que YO sienta, lo que YO quiera, lo que YO
trascienda, lo que YO pueda controlar. Todo centrado en el Yo… ¡Y NO EN DIOS!
Ante tantas variaciones y
decepciones, la iglesia también se ha visto afectada. Muchas iglesias se han
convertido en centros pragmáticos y humanistas, rechazando las verdades
bíblicas absolutas, cambiándolas por resultados visibles y concretos, para
satisfacer el “yo” de las almas. Más que sanidad interior, espiritualidad
santa, verdadera conversión, las iglesias de hoy buscan resultados en cantidad,
emocionalidad y métodos con resultados instantáneos. Crean cristianos efectivos
de corta duración, que vuelven a la más profunda decepción cuando se dan cuenta
del vacío en sus almas. ¡Sin embargo,
esto es totalmente contrario a la Biblia, a lo que Dios enseña!
El actual estado de las cosas es
porque simplemente reinó la gloria al “YO”, por sobre la gloria a DIOS. Sin
embargo, la verdadera espiritualidad parte reconociendo que solo en Dios hay
pleno gozo (Salmos 16:11). La verdadera espiritualidad crea hábitos de
santidad; los hábitos de santidad crean una verdadera relación con Dios, una
real espiritualidad. Si decides por Dios, debes negarte a ti mismo, llevar la
Cruz y seguirle, aún en contra de lo que te guste, si eso se opone a lo establecido
por Dios. Bendiciones.
Pastor Marcelo Valdés
No hay comentarios:
Publicar un comentario